Un estudio reciente publicado en la revista Nature Medicine ha revelado que el envejecimiento humano comienza a notarse a partir de los 34 años. Este hallazgo, realizado por investigadores de la Universidad de Stanford, marca un punto crucial en la comprensión de cómo y cuándo nuestro cuerpo empieza a mostrar signos de envejecimiento.
¿Cuándo Comenzamos a Envejecer?
El estudio, que analizó muestras de sangre de 4,263 personas entre 18 y 95 años, identificó cinco señales que indican el inicio del envejecimiento:
Metabolismo más lento
Debilitamiento de la estructura ósea
Problemas de memoria
Cambios en los patrones de sueño
Deterioro general de la estructura ósea
El envejecimiento no ocurre a un ritmo constante, sino que se manifiesta en tres etapas distintas: a los 34, 60 y 78 años. Los investigadores encontraron que el número de proteínas en la sangre cambia significativamente en estas edades, lo que indica un cambio en la programación biológica del cuerpo. Según Tony Wyss-Coray, profesor de neurología y autor principal del estudio, “los niveles de muchas proteínas permanecen constantes durante un tiempo y luego, en un punto u otro, experimentan cambios repentinos hacia arriba o hacia abajo”.
Importancia de los Hábitos Saludables
El Dr. Rubén Muhlberger, especialista en medicina antiaging y estética-regenerativa, sostiene que es crucial adoptar hábitos saludables para vivir más y mejor. “La clave está en tener una alimentación consciente y en realizar ayunos intermitentes de cuatro, seis y hasta ocho horas”, señala Muhlberger. Estos hábitos activan una enzima llamada telomerasa, que ayuda a mantener nuestra información genética y prevenir su deterioro.
Aunque la expectativa de vida ha aumentado, el desafío actual es mejorar la calidad de vida. Muhlberger destaca la necesidad de “salir del concepto de sobrevivir y convertirnos en supervivientes”. Esto implica mantener un cerebro activo, un sistema inmunológico fuerte y una buena tonicidad muscular a lo largo de los años. Muhlberger también ofrece consejos prácticos para después de periodos de excesos, como las fiestas de fin de año.
Recomienda realizar un ayuno al inicio de la semana siguiente para ayudar al cuerpo a recuperar su equilibrio.
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