El inicio del año 2024 ha traído consigo una preocupante situación económica para México, con la mayor cuesta de enero experimentada en los últimos siete años. Según el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) del Inegi, la inflación mensual alcanzó un preocupante 0.89%, marcando una tendencia al alza que preocupa a los analistas.
Los datos revelan que diversos productos y servicios han experimentado incrementos significativos, impactando directamente en el bolsillo de los mexicanos. El jitomate encabezó la lista con un asombroso aumento del 52.14%, seguido de cerca por la cebolla con un 21.17%. Los establecimientos de comida también se vieron afectados, con un aumento del 1.15%, al igual que los restaurantes y similares con un 0.89%.
Los cigarros experimentaron un incremento del 3.90%, atribuido al aumento de impuestos especiales vigentes desde enero. El gas doméstico LP subió un 2.41%, reflejando el alza en los precios internacionales del petróleo. Otros productos y servicios, como la vivienda propia, los refrescos envasados y la calabacita, también mostraron aumentos significativos.
Las zonas más afectadas por esta cuesta de enero fueron Guerrero, con una inflación mensual del 1.72%, y Acapulco como el municipio más impactado, con un aumento del 1.80%. Tlaxcala, Chiapas, Puebla y Oaxaca también sufrieron incrementos considerables, reflejando la magnitud del desafío económico que enfrenta el país.
Con estos datos alarmantes, los analistas advierten sobre la urgencia de medidas para contener la inflación y proteger el poder adquisitivo de los ciudadanos. La preocupación se agrava al considerar que la inflación anual se ubica en un 4.88%, superando la cifra objetivo establecida por el Banco de México.
En un escenario donde la economía global enfrenta desafíos significativos, la estabilidad económica de México se ve amenazada. Se espera que las autoridades tomen medidas efectivas para contener esta tendencia preocupante y mitigar el impacto en la población.