El mundo del arte lamenta la pérdida de uno de sus más grandes exponentes, Fernando Botero, quien falleció a los 91 años en su hogar en el principado de Mónaco. El pintor y escultor colombiano, reconocido por sus obras caracterizadas por la representación de figuras voluptuosas, deja un legado que ha impactado a nivel global.
La noticia del fallecimiento de Fernando Botero se dio a conocer la mañana del viernes 15 de septiembre, conmocionando al mundo artístico y a sus seguidores. Botero se encontraba en proceso de recuperación tras enfrentar una difícil enfermedad que lo llevó al hospital.
La causa de su muerte se relaciona con una neumonía que lo llevó a ser atendido en un hospital del norte de Italia, donde se encontraba hospitalizado. A pesar de haber sido dado de alta el 14 de septiembre, lamentablemente, el artista falleció en su hogar debido a complicaciones derivadas de esta enfermedad.
Lina Botero, hija de Fernando Botero, compartió que su padre había estado luchando contra la enfermedad durante cinco días, destacando su delicado estado de salud debido a la neumonía.
En una emotiva entrevista con W Radio, Lina Botero reveló que estuvo presente en el momento de la muerte de su padre y que este falleció en paz, con ella tomándole la mano.
La salud de Fernando Botero se vio fuertemente afectada por la pérdida de su esposa, Sophia Vari, quien falleció hace cuatro meses debido a complicaciones relacionadas con el cáncer. La partida de su amada esposa afectó profundamente a Botero, quien ya lidiaba con la enfermedad de Parkinson durante muchos años.
Lina Botero compartió que tras la muerte de Sophia Vari, su padre encontró consuelo en su arte y continuó pintando hasta sus últimos días. Pese a las dificultades de salud que enfrentaba, Fernando Botero seguía siendo un apasionado creador, dedicando horas en su estudio.
La hija del artista mencionó que sus hermanos, Fernando Botero Zea y Juan Carlos Botero, se encuentran viajando a Mónaco para despedir a su padre. Los restos de Fernando Botero descansarán junto a los de su amada esposa, Sophia Vari.
El arte de Fernando Botero ha dejado una marca indeleble en la historia del arte contemporáneo, caracterizado por sus personajes de formas generosas y esculturas de acero que adornan las calles y plazas de las principales ciudades del mundo. Su legado perdurará como testimonio de su genialidad y pasión por el arte.
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