Mientras algunos se quejan de las soluciones poco convencionales que ofrece su presidente, en Ecuador la situación no es muy diferente. Daniel Noboa, el presidente ecuatoriano, ha sugerido que la crisis diplomática con México podría resolverse con tacos y ceviche, minimizando así un conflicto que ha provocado la condena internacional.
En una entrevista para el canal australiano SBS, Noboa hizo estas declaraciones, mostrando una percepción alterada de la realidad al no reconocer la gravedad de la situación. A pesar de la condena internacional por el asalto a la embajada de México en Quito, Noboa asegura que están "en el lado correcto de la historia".
Noboa incluso sugiere que las convenciones internacionales, como la Convención de Viena y la de Caracas, deberían ser reelaboradas, sugiriendo que permiten acciones como las que ocurrieron entre Ecuador y México. Esta postura, sin embargo, contradice las acciones tomadas por México, que ha llevado el caso ante la Corte de Justicia Internacional y exige una disculpa pública por el incidente.
Mientras tanto, en México se espera una respuesta adecuada por parte del gobierno ecuatoriano, ya que el ataque a una sede diplomática no puede ser ignorado ni resuelto con tacos y ceviche. La comunidad internacional observa de cerca este caso, esperando que se establezca un precedente claro sobre el respeto a la soberanía y la integridad de las embajadas.
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